Prime View International, una compañía taiwanesa que fabrica pantallas para los lectores de los libros electrónicos Kindle, de Amazon, busca consolidar su dominio sobre la nueva industra del “papel electrónico” con la adquisición de E Ink, una empresa estadounidense propietaria de tecnología clave para la fabricación de estas pantallas.
Prime View, que integra el grupo Yuen Foong Yu, el mayor de Taiwan dedicado a la producción de papel y pulpa, es la mayor firma manufacturera del mundo en el segmento de módulos de papel electrónico en términos de ventas, gracias a los contratos para proveer pantallas para la familia de productos Kindle y los dispositivos Reader Digital Book, de Sony.
E Ink, con sede en Massachusetts, fue pionera de la tecnología que permite a los lectores fijar electrónicamente imágenes diferentes en la pantalla. Al combinar ambas compañías, Prime View espera acelerar la actividad de investigación para crear nuevas tecnologías como monitores a color y pantallas flexibles, declaró la empresa.
Esta operación de u$s 215 millones es el último ejemplo de la forma en que las compañías taiwanesas, que tradicionalmente son más fuertes en la producción masiva barata de componentes electrónicos, están ascendiendo en la cadena de valor.
Scott Liu, presidente y CEO de Prime View, dijo: “La gente de ambas compañías se unirá para proveer la mejor experiencia en lectura digital del mundo”.
Aunque las lectoras de libros electrónicos están disponibles desde hace más de una década, recién se han popularizado en los últimos dos años con el lanzamiento de dispositivos como el Kindle.
En Estados Unidos, en particular, eventualmente su éxito podría presentar un desafío a los modelos tradicionales de distribución de medios. Se espera que el mercado de libros electrónicos crezca de 1,1 millones de unidades en 2008 a 20 millones de unidades en 2012, según la compañía de investigaciones de mercado iSuppli. A diferencia de las pantallas LCD tradicionales, que dependen de una luz trasera para iluminar la pantalla, las pantallas de papel electrónico no necesitan una fuente lumínica interna y, por lo tanto, resulta más fácil leer. También consumen menos energía, una característica clave en un dispositivo portátil a batería.
Habitualmente el monitor es el componente más caro. En Kindle 2, cuya fabricación cuesta u$s 185, el costo de la pantalla es de u$s 60, según iSuppli. Sin embargo, E Ink enfrenta la competencia de otros fabricantes que esperan avanzar más rápido a la próxima generación de tecnología. Prime View estuvo entre las primeras que se dedicaron a la producción de pantallas con papel electrónico, gracias a que Yuen Foong Yu era propietaria de Hydis, una manufacturera de pantallas planas.
(Fuente: Traducción de un artículo de Financial Times)