Los infografistas son una de las razas de periodistas más atractivas dentro de cualquier periódico o revista, aunque aún así no todos los medios cuentan con uno. Desde siempre me vi atrapado por cómo trabajan, porque deben mezclar como ninguno valores como simpleza, belleza y profundidad de la información. “Infografía significa contar historias de forma visual, historias que solo la foto o el texto no pueden explicar”.
La frase es de Fernando Baptista, uno de los más distinguidos infografistas en el mundo. Editor senior de infografía en National Geographic, vive en Washington desde hace años, aunque se recibió en Bellas Artes por la Universidad del País Vasco. En 2012, fue nombrado uno de los cinco infografistas más influyentes del mundo durante los últimos 20 años y lleva ganados más de 125 premios en las ediciones de la Society for News Design (SND). Incluso, el año pasado fue nominado a un Emmy por Walking With Giants en la categoría de “New Approaches: Arts, Lifestyle, Culture”.
Conocí su nombre hace varios años cuando hice un curso online con Alberto Cairo. Ahora, el mismo Baptista está dando un curso online en domestika.org, la comunidad online de creativos en español, que si no conocen les recomiendo darse una vuelta. A continuación, explica cómo se trabajan en National Geographic, sin duda una placer de revista en estos términos:
Desde el encargo a la entrega: ¿Cuánto dura el proceso de elaboración de la infografía?
Normalmente, todo el proceso suele durar varios meses. Cuando se te asigna el proyecto tienes varias fechas de entrega. Primero, empiezan las reuniones con el story team para perfilar la dirección del artículo y muestro las primeras ideas al equipo ejecutivo. Cuando éstas se aprueban, en ocasiones viajo para encontrarme con los expertos en el tema elegido y recopilar información. Con todo ello diseño el gráfico, se aprueba y realizo la ilustración y todas las partes del gráfico. Solo esta etapa dura más de dos meses. Suelo trabajar con 4 o 5 gráficos a la vez, en diferentes fases porque en ocasiones los expertos tardan mucho en respondernos y tener tiempo es fundamental. Por ejemplo, ahora mismo estoy trabajando en un proyecto para abril de 2015.
¿Y cómo es tu equipo de trabajo en National Geographic?
Para cada gráfico cuento con un investigador freelance, que se encarga de buscar la información y de ser el nexo de unión entre mi trabajo y los expertos. También trabajo con un asistente que me ayuda en la fase de producción y refinamiento. En paralelo, el diseñador de la historia trabaja con el título y la entradilla del gráfico; en cada artículo usa fuentes diferentes para el título. Cuando diseño el gráfico escribo los textos explicativos y, después, un escritor se encarga de refinarlos. Si el gráfico lleva un mapa también participa un cartógrafo.
A continuación, otro investigador del texto del artículo revisará junto a mi investigador todo el contenido del infográfico. Cuando el gráfico está terminado, otra persona se encarga de los ajustes de color para imprenta. Hoy en día, con las plataformas digitales, contamos con otro asistente para el iPad y, si es necesario, también con un programador. Además, si producimos algún video del gráfico, trabajo con un productor de vídeo. Como véis, al final hay mucha gente implicada.
¿Cuál es la infografía que estás deseando hacer?
La verdad es que hasta ahora casi todos los temas que he hecho en National Geographic me han interesado, aunque una cosa he aprendido: nunca sabes qué historia tiene más potencial. Con algunos proyectos empecé con pocas ilusiones y luego el tema dió mucho de sí, y viceversa, algunos parecen buenísimos y luego no lo son tanto. Normalmente hago gráficos de historia natural, ciencia o arqueología y me encantaria hacer gráficos diferentes, de temas que me gustan como el cine o el mundo del cómic.
¿Es difícil equilibrar el atractivo artístico con la función informativa?
Para mí es lo más importante. Encontrar este balance. Intento que mis gráficos no sean solo ilustraciones bonitas, cuento historias con ellos. Dedico muchísimo tiempo a investigar y a diseñar el concepto del gráfico. Por supuesto, el que sea atractivo me parece vital, pero siempre condicionado por la información. Mi idea es que el lector entre a leer el gráfico porque es atractivo y que cuando lo lea piense que lo ha entendido de una forma simple y que le han contado algo.
Y ahora trabajas también para tablet. ¿Crees que las infografías ganan atractivo en este soporte?
Llevo más de 20 años trabajando para papel y fue complicado cambiar el chip y pensar en animaciones, vídeos e interactivos, pero sin duda los gráficos pueden ganar muchísimo de este modo. La interacción, el movimiento y el sonido tienen más espacio, aumentando su atractivo, y además, puedes sorprender al lector con cosas nuevas. Ahora diseño el gráfico para papel y al mismo tiempo para tablet. Algunos de mis proyectos de los que estoy más contento son digitales: la animación de stop motion de la Isla de Pascua, hacer nadar a un pingüino emperador o crear el personaje de Filippo Brunelleschi, que nos cuenta cómo construyó Il Duomo de Florencia.